Una receta infalible para una pizza casera (y otra para soñar)

La mejor pizza casera de la que me acuerdo la hacía mi abuela. Utilizaba la masa hecha con levadura fresca y un horno de leña que estaba en la parte de atrás de la casa del campo. La receta era muy parecida a la de un restaurante de un pueblo cercano, donde las mesas llevaban esos manteles de hule blanco y rojo, y el dueño saludaba a todo el mundo por su nombre.

Ese sabor, creo, es irrepetible. El horno ya no está, la casa del campo se vendió hace años y el restaurante cerró. Y yo… no he vuelto a hacer pizza que no sea con la masa prefabricada del Mercadona, rápida y funcional, pero sin alma.

Sin embargo, el otro día encontré una receta “infalible” para una masa de pizza, y los recuerdos volvieron. No es la misma, claro. Pero se parece. Y lo mejor: es fácil, rápida y queda sorprendentemente buena. Por eso hoy comparto las dos versiones:
👉 La original (más difícil, pero insuperable).
👉 Y la infalible (para cuando hay hambre, poco tiempo, pero muchas ganas).

Versión 1: La receta de la abuela (masa tradicional con levado)

Ingredientes (para 2 pizzas grandes)

  • 500 g de harina de fuerza

  • 325 ml de agua tibia

  • 15 g de levadura fresca (o 5 g de levadura seca)

  • 10 g de sal

  • 2 cucharadas de aceite de oliva virgen extra

Instrucciones

  1. Activa la levadura:
    Desmenuza la levadura fresca en el agua tibia (no caliente, unos 35-37 °C es ideal).

    • Truco para elegir buena levadura: debe tener un olor suave y agradable, como a pan o cerveza. Si huele raro, muy fuerte o ácido, no está buena.

    • Al mezclarla con el agua, deja reposar unos 10 minutos. Si está activa, verás que aparecen burbujitas y una ligera espuma en la superficie. Eso es buena señal: la levadura está viva y lista para hacer magia.

  2. Mezcla: en un bol grande, pon la harina, la sal y el aceite. Añade la mezcla de agua con levadura poco a poco, mezclando hasta formar una masa pegajosa.

  3. Amasa: pasa la masa a una superficie enharinada y amasa al menos 10 minutos, hasta que esté suave y elástica.

  4. Primer levado: forma una bola, colócala en un bol engrasado, cúbrela y deja reposar 2 horas en un lugar cálido.

  5. Segundo levado (opcional): si tienes tiempo, desgasifica la masa, vuelve a bolear y deja levar otra hora.

  6. Forma la pizza y hornea: estira con las manos o rodillo, pon tus ingredientes favoritos y hornea a tope de temperatura (250 °C o más), sobre piedra o bandeja precalentada, 8-10 minutos.

    • Truco de horno: ¡El horno tiene que estar MUY caliente! Si puede estar precalentado durante al menos 20-30 minutos antes de meter la pizza, mejor. Así consigues una base crujiente y un borde con burbujas doradas.

Versión 2: La receta infalible (crujiente y lista en menos de 1 hora)

Ingredientes (para 2 pizzas finas)

  • 250 g de harina común (puedes mezclar con integral o espelta)

  • 1 cucharadita de sal

  • 1 cucharadita de levadura seca de panadería

  • 150 ml de agua tibia

  • 1 cucharada de aceite de oliva

Instrucciones

  1. Mezcla y amasa: junta todos los ingredientes hasta obtener una masa lisa (5 minutos de amasado basta).

  2. Reposo corto: deja reposar 30 minutos tapada con un paño limpio.

  3. Estira fina: divide en dos, estira con rodillo sobre papel de horno.

  4. Pre-hornea 5 min: en horno precalentado a 230 °C, sin ingredientes encima.

  5. Añade ingredientes y hornea: salsa, queso, lo que te apetezca, y vuelve al horno 8-10 min más.

Resultado:

Base fina y crujiente, lista en menos de una hora. Ideal para noches de peli y manta, o para cocinar con peques y dejar que cada uno arme la suya.

  • Truco importante: precalienta bien el horno. Aunque parezca exagerado, necesita estar al máximo para que la masa quede bien hecha por abajo y no se humedezca con la salsa. Si tienes piedra para pizza o una bandeja de hierro, úsala.

 Ideas de toppings (más allá de lo clásico)

  • Blanca de ricotta con espinacas y nueces

  • Pera, gorgonzola y rúcula (sí, queda brutal)

  • Salsa de tomate casera con ajo asado y albahaca fresca

  • Setas con huevo de codorniz al final del horneado

¿Te ha entrado antojo pero hoy no te apetece cocinar? Entonces no te pierdas este ranking: Las 5 Mejores Pizzerías de El Puerto de Santa María— para cuando el horno descansa, pero el apetito no.

Bonus: playlist para cocinar pizza

Pon a sonar algo con ritmo italo-disco o jazz suave... o mi favorita: Kitchen Swagger, la playlist que me transporta directo a esas cocinas con olor a pan, a tomate, a tiempo compartido.

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